SamurĂ¡i

-         
 

- Ahora que tienes mi espada en tu cuello, quĂ© harĂ¡s para defenderte.

- Nada. Moriré como es debido, pero te esperaré en la otra vida. Pues solo has ganado una batalla y no la guerra.

2 coment�rios:

escuchando palabras dijo...

adhiero a este pensamiento...son situaciones que se nos presentan en la vida misma....feliz domingo!

Juan Camilo dijo...

Escuchando palabras

es cierto, las vidas se relacionan